El calor sensible es una forma de energía térmica que está asociada con el cambio en la temperatura de un objeto o sustancia sin que ocurra un cambio de estado o fase.
El calor latente de un refrigerante se refiere a la cantidad de energía térmica necesaria para cambiarlo de fase, sin que se produzca un cambio de temperatura.
En la refrigeración es muy frecuente hablar de toneladas de refrigeración, la cual es realmente una unidad británica basada en el efecto frigorífico de la fusión del hielo.
En el condensador enfriado por aire, elemento del ciclo de refrigeración sucede el proceso de cambio de estado del refrigerante que consta de tres pasos.
El evaporador de expansión directa de convección forzada por aire, es el elemento del ciclo de refrigeración que absorbe el calor de una cámara de refrigeración al evaporar el refrigerante cuando atrapa el calor.
La mayoría de las sustancias pueden existir en estado sólido, líquido o gaseoso, dependiendo de su temperatura y presión a la que se encuentren expuestas.
Los gases no condensables causan pérdidas de eficiencia en el sistema. Conocer los efectos, detectarlos y eliminarlos es elemental para tener equipos eficaces y en buen estado.